Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha reaccionado a las declaraciones del embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, quien afirmó que la detención de Ismael ‘El Mayo’ Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa, debería celebrarse. En la conferencia de prensa matutina del 30 de octubre, Sheinbaum enfatizó que la forma en que se llevó a cabo la captura es tan importante como el hecho mismo de la detención.
“Comentábamos hoy en el gabinete de seguridad: el fin no justifica los medios. No porque hayan detenido a un narcotraficante uno no ve la manera en la que se detuvo. La manera en la que haces las cosas también tiene fondo”, declaró, sugiriendo que el proceso detrás de la detención debe ser examinado con atención.
La presidenta también comentó que el tema ha sido parte de las conversaciones entre Salazar y Juan Ramón de la Fuente, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE). “Hay comunicación entre el canciller y el embajador, hay reuniones. Nosotros siempre vamos a pedir respeto y condiciones de igualdad, que se cumplan las normas nacionales e internacionales en el caso de detenciones”, añadió.
El contexto de este intercambio se intensificó cuando, en ‘La Mañanera del Pueblo’ del 29 de octubre, el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, expresó que el gobierno de Estados Unidos aún no había proporcionado toda la información necesaria sobre la captura de ‘El Mayo’, efectuada el 25 de julio en El Paso, Texas. Gertz Manero destacó la importancia de conocer los detalles sobre la llegada de Zambada a Estados Unidos y cuestionó por qué no se detuvo al piloto del avión que lo trasladó.
Poco después, el embajador Salazar defendió la acción estadounidense, afirmando que “lo que pasó en Sinaloa debería celebrarse” y sugiriendo que el éxito de la operación es una victoria tanto para el pueblo mexicano como para el estadounidense. “A mí me sorprende tanto que no se pueda decir victoria del pueblo de México, victoria de Estados Unidos, resultado del trabajo que hemos llevado en los últimos tres años”, expresó. Además, rechazó los señalamientos sobre la implicación de autoridades estadounidenses en el secuestro del narcotraficante, aclarando que el avión utilizado no pertenecía a su país.
Este cruce de declaraciones resalta las tensiones existentes en la relación entre México y Estados Unidos, especialmente en temas de seguridad y colaboración en la lucha contra el narcotráfico. Las palabras de Sheinbaum y Salazar sugieren que la cooperación entre ambos países, aunque es esencial, debe basarse en un respeto mutuo y en la transparencia de las acciones realizadas.