Por Juan Pablo Ojeda
Con un ángel guiándolos desde el cielo, los Los Ángeles Dodgers han conquistado su octavo título de la Serie Mundial, imponiéndose en una emocionante serie de cinco juegos contra los New York Yankees. Este enfrentamiento, que evocó recuerdos del Clásico de Otoño de hace 43 años, culminó en el icónico Yankee Stadium, donde los angelinos dieron la vuelta al marcador en un ambiente de celebración y nostalgia. La nueva corona fue dedicada a Fernando ‘El Toro’ Valenzuela, una leyenda del equipo que falleció poco antes del inicio de la serie.
Remontada de campeones
La final fue un verdadero espectáculo. Cuando parecía que los Yankees se encaminarían hacia su segunda victoria, los Dodgers protagonizaron una remontada épica, anotando dos carreras en el octavo episodio para voltear el marcador a 7-6. Los errores de los Yankees fueron fatales, pues dejaron escapar una ventaja de cinco carreras, evidenciando cómo el equipo se desmoronaba en los momentos decisivos.
El encuentro comenzó de manera explosiva, cuando Aaron Judge, el ‘Juez’, hizo vibrar el Yankee Stadium con un cuadrangular de dos carreras que encendió las esperanzas neoyorquinas. Sin perder tiempo, Jazz Chisholm Jr. siguió con otro vuelacerca, poniendo el marcador 3-0 en la primera entrada.
En el segundo inning, el mexicano Alex Verdugo respondió con un sencillo que permitió a Anthony Volpe cruzar el plato. La quinta carrera llegó de la mano de Giancarlo Stanton, quien también se lució con un impresionante jonrón en el tercer episodio.
A pesar de que el abridor de los Yankees, Gerrit Cole, había mantenido el control del juego sin permitir hits hasta la quinta entrada, los neoyorquinos comenzaron a errar, lo que permitió a los Dodgers desatar un rally de cinco carreras para igualar la pizarra. Aunque los Yankees recuperaron la delantera en el sexto inning, los angelinos mostraron su garra al llenar las bases en el octavo, donde Gavin Lux y Mookie Betts impulsaron las carreras decisivas que sellaron su victoria.
CAMPEONES DE LA SERIE MUNDIAL 2024. THEY NOT LIKE US. #SERIEMUNDIAL pic.twitter.com/P7ymrDncgW
— Los Dodgers (@LosDodgers) October 31, 2024
La ayuda divina del ‘Toro’
La conexión con Valenzuela fue palpable durante toda la serie. En el primer juego, cuando los Dodgers estaban a un out de ser derrotados, Freddie Freeman, como si tuviera una intervención divina, conectó un Grand Slam que cambió el rumbo del encuentro. Este milagro continuó en el Juego 5, donde, a pesar de caer por cinco carreras, los Yankees cometieron errores inusuales que permitieron a los angelinos remontar y llevarse el título.
La dedicación de esta Serie Mundial a Fernando Valenzuela, quien había sido el lanzador clave en la remontada de los Dodgers en 1981, agrega un nivel emocional y simbólico a la victoria. Valenzuela, un ícono y fuente de inspiración, sigue vivo en la memoria colectiva del béisbol y en el corazón de los aficionados de los Dodgers.
