CDMX a 1 de abril, 2024.- Ante el creciente problema de los incendios forestales en México, exacerbado por las altas temperaturas y sequías a lo largo del país, la senadora Cecilia Margarita Sánchez García ha hecho un llamado urgente a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para que informe sobre las estrategias y acciones implementadas para enfrentar esta amenaza ambiental. Esta solicitud, que ahora está en manos de la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático para su análisis, busca esclarecer cómo se está trabajando para prevenir, reducir y controlar los incendios forestales, especialmente aquellos provocados por actividades humanas.
El Servicio Meteorológico Nacional ha clasificado el riesgo de incendios forestales como «muy alto» en áreas críticas como el Estado de México, Tlaxcala, Morelos y Ciudad de México, con otros estados no muy lejos detrás. Esta situación se ve reflejada en el alarmante registro de 611 incendios forestales en 23 entidades federativas hasta mediados de marzo de este año, afectando más de 18,500 hectáreas de terreno.
La senadora Sánchez García destaca que las causas humanas detrás de estos desastres van desde fogatas mal apagadas y quemas agropecuarias no controladas hasta la acumulación de basura y efectos naturales como rayos o erupciones volcánicas. Estos incendios no solo consumen la vegetación y fauna local, sino que también pueden escalarse a desastres mayores que arrasan con todo a su paso, incluyendo comunidades humanas, exacerbando así la crisis climática global.
Los incendios forestales son una fuente significativa de emisiones de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono y el ozono, además de partículas finas que pueden permanecer suspendidas en el aire, lo que agrava las condiciones de salud pública, incrementando las enfermedades respiratorias y cardiovasculares. Además, la pérdida de biodiversidad y la destrucción de hábitats son consecuencias directas de estos desastres naturales.
La preocupación de la senadora Sánchez García es compartida por ambientalistas y la población en general, quienes ven en la respuesta del gobierno una medida crucial para mitigar los efectos adversos de los incendios forestales. La demanda por una estrategia integral que incluya prevención, reducción y control de incendios es más fuerte que nunca, subrayando la importancia de proteger los ecosistemas forestales del país y, por ende, la salud y seguridad de sus habitantes.